La
idea de la clasificación ha surgido de la DGT para combatir la
siniestralidad vial
La
Dirección General de Tráfico ha pensado combatir la siniestralidad
en nuestras carreteras a través de la creación de un ranking de
autoescuelas en base a la accidentalidad de sus alumnos. En pocos
días, esta idea de la DGT ha sido rechazada con contundencia por el
sector.
Tanto
colectivos de automovilistas y víctimas como analistas y
asociaciones de formación vial estiman que es un error la creación
de esta clasificación porque únicamente será una forma de
“estigmatizar” a los centros.
Según
los diversos representantes del sector, una clasificación que
únicamente valore los accidentes de los alumnos de una autoescuela
evita otras variables que también influyen en la seguridad. Tal como
indica Antonio Lucas, portavoz del RACE, “no es lo mismo conducir
en un centro urbano que en un medio rural. O hay provincias que
tienen mejores carreteras que otras…”.
María
Seguí, máxima responsable de la DGT, ha declarado que la iniciativa
consiste en la creación de una clasificación de los centros de
formación, en base de los accidentes que hayan tenido sus alumnos en
los 6 o 12 meses posteriores a la obtención del permiso. Aunque un
portavoz de la Jefatura ha puntualizado que esto es “solo una
idea”, que aún no ha alcanzado la categoría de proyecto ni se ha
profundizado en ella.
El
presidente de la asociación de víctimas de accidentes DIA,
Francisco Canes, ha calificado esta idea de una “ocurrencia” de
Seguí. “En la siniestralidad influyen muchísimos factores. Son
tantas las variables que, desde un punto de vista científico, esa
clasificación no puede arrojar resultados viables”. Además, el
representante de DIA insiste en que “no es igual, por ejemplo,
conducir habitualmente por autovía que por carretera nacional”.
Desde
Automovilistas Europeos Asociados (AEA), Mario Arnaldo declara que
“los accidentes dependen mucho del tipo de vehículo: de las
prestaciones o de la antigüedad, entre otros factores. Y muchas
familias le dejan el coche más viejo a los que se acaban de sacar el
carné”.
Esta
idea propuesta por la DGT no ha aparecido en un contexto cualquiera.
El sector se encuentra debatiendo desde hace meses las medidas para
reactivar la lucha contra la siniestralidad en España, que continúa
sin grandes cambios desde 2013. La disminución de fallecidos en
nuestras carreteras lleva tres años parado (en 2014 fue registrada
una subida en el número de víctimas, la primera en 11 años) y este
ejercicio ha empezado con cuatro meses consecutivos de incremento de
víctimas. A pesar de esto, la directora de la DGT rechazó ofrecer
alguna explicación en la Comisión de Seguridad Vial del Congreso
alegando, en línea con el Gobierno de Mariano Rajoy, que el
hemiciclo no podía controlar a un Ejecutivo al que no había dado su
confianza.
La
presidenta de la asociación de víctimas Stop Accidentes, Anna
Novella, ha destacado que “mejor que destinar recursos a una
clasificación de autoescuelas, la DGT debería centrar sus esfuerzos
en la educación: regular mejor la formación que se imparte en estos
centros o implantar la asignatura obligatoria de educación vial en
los colegios”.
“La
mayoría de las veces, la formación vial que se da en las
autoescuelas tiene como único fin que se superen las pruebas para
conseguir el carné”, según indica el portavoz del RACE.
Fuente:
elpais.com
